Guti

No puede ser

"Todavía no salgo de mi asombro"... Esas eran las palabras de Isidro Morgan después de que le mostramos que en la tapa de la revista Hola estaba él con una zunga. "Ya no hay respeto por nada , ni por nadie... aparte al tipo que me sacó la foto lo tengo que haber visto, porque a más de 3 metros no estaba". Isidro ya inicio acciones legales contra la revista por difamación y violación de la intimidad. "Además escriben abajo que me agarraron piyando y solo había entrado hasta las rodillas, ni había llegado a la altura de la zona sensible... ". 

La difamación es un precio muy alto, y esta es de las cosas que tienen un precio tan alto que ni Mastercard puede pagar.  

Me amenazaron que me iban a matar el canario

El martes pasado alrededor de las 20 horas cuando Don Isidro Morgan se disponía a dejar el trabajo hacia su hogar, un grupo de bándalos decidieron acometer contra él. En un principio fueron burlas por su sombrero y sus espadas, pero todo cambió cuando vieron a la fiel mascota "Octavio Frodo", una cotorra dominicana que va siempre posando en el hombro o en el sombrero. La cosa pasó a mayores cuando uno de ellos pegó un chicle a la cotorra. "Ahí se pasaron, yo fui respetuoso y sólo le pegué a tres, pero le tenía que haber arrancado la cabeza a todos". Ahora Don Isidro Morgan vuelve a los tribunales después de tres meses, pero esta vez por la denuncia hecha por los malvivientes a quienes les propinó la golpiza, de los cuales uno está internado por el brutal ataque de la cotorra. Vecinos de la zona cuentan que la cotorra levantó a uno de la espalda, lo subió en el aire unos 15 metros y lo soltó en una pileta pelopincho, por lo que se rompió ambas piernas. "Nos pensamos que era Batman!" comentaba el joven Noah Perci.

Increible. ¿Cuando te va a pasar algo normal? Isidro....

"A los dos días ya me decían Capitán"

Breve recorte de la nota que le hicieron a Isidro del diario "El Pais" de Uruguay a los pocos días de haber empezado en Carrefour.
R: ¿cómo estás Isidro?
IM: Tranquilo... (apoya el codo en la mesa y se rasca el mentón). Ya bien encarrilado.
R: Todo muy rápido, no?. Salís de la granja, entrás a trabajar y a mitad de mes ya te elijen como el empleado del mes. Eso demuestra que sos especial.
IM: Si. Me hice lugar rápido, y eso que el mundo de los reponedores es un ambiente hostil.
R: ¿nadie es recibido con buena cara?
IM: Nooo, es más, a mi me la quisieron poner dificil, pero a los dos días ya me decían Capitán. Igual todavía hay roces... (Nos muestra una cicatriz mal curada en el brazo).
R: ¿Eso fue adentro del local?
IM: Empezó por una discusión tonta con los jefes de sección, y al final se tuvieron que atrincherar en la góndola de los lácteos dos días. Nosotros tuvimos una baja. (mira con la mirada perdida mientras niega con la cabeza).
R: ¿Ahora que vistas tenés para el futuro?.
IM: Crecer y seguir demostrando.
R: Eso es lo que todos esperan de vos, por eso ¿qué tenés.... (Isidro interrumpe con cara de mal humor)
IM: Hace rato que estas dele tutearme y no me preguntaste, soy una persona respetable. No te lo tomes a mal, pero si me vas a tutear, al menos pedime permiso...
R: Disculpá... ehh... disculpe...
IM: Ok, y yo me voy yendo que tenía que haber entrado a las 8 y ya son casi 11 y veinte...
R: No vaya a ser cosa que te saquen del cuadro!. no?. (poniendo cara cómplice).
Isidro se gira enfurecido y lo mira con tanta intensidad que al reportero se le prenden fuego las zapatillas.
R: Ahhhh, me voy, me voy... (el reportero se va corriendo mientras junta las cosas a las apuradas).

Otra gran muestra de las capacidades de Isidro Morgan. Un soñador en tiempos donde soñar no le importa a nadie.

Al que diga que trabajar en Carrefour es de giles, lo liquido...

Isidro Morgan, con pasos de campeón, no dudó ni un segundo en entrar en Carrefour cuando salió de la granja de recuperación.  En una entrevista para el diario Clarín, Isidro dijo: "Nunca había creido en buscar trabajo por internet, pero te digo, que mandé un par de CVs y en menos de 5 días ya estaba adentro". En la nota le preguntaron si le resultaba incómodo trabajar con sus espadas, a lo que replicó: "son como mis hijas, si me querés a mi para trabajar acá,  ellas también vienen conmigo. Sino decime donde está el baño, que me echo un cloro y me voy. Todo es actitud, viste?. Seguro que si dejaba las espadas después me pedían que me afeite". 

Así hay que ser en esta vida. Nostros te creemos y te queremos Isidro.